La piel del contorno de ojos es la mas fina y es la zona más frágil del rostro, con lo que se refleja fácilmente cualquier signo de cansancio o envejecimiento. Motivo suficiente para prestarle mayor atención.
El gesto de parpadear, altera las fibras de colágeno y elastina, provocando una mayor pérdida de elasticidad en esa zona. Además, pasar horas frente a un ordenador, móvil o tablet hacen que la microcirculación se ralentice y el líquido linfático se estanque, provocando hinchazón y ojeras.
Los contornos de ojos incluyen activos más específicos para los problemas de esa zona, como drenantes y antiinflamatorios que ayudan a activar la circulación y a drenar los líquidos para combatir las ojeras y las bolsas.
La mirada es una potente forma de expresión, por ellos debemos cuidarla y mimarla.
Como conclusión, se podría utilizar la crema hidratante para el contorno, pero esta zona no recibiría los cuidados adecuados. Utilizar un contorno de ojos antes de tu crema hidratante te ayudará a aliviar las ojeras y las arrugas específicas de la zona.