DISFRUTAR DE UNA BUENA HIGIENE BUCODENTAL

En los países desarrollados, después de las enfermedades cardiovasculares y el cáncer, las dolencias bucodentales son las más prevalentes; y entre ellas, destacan la caries y la enfermedad periodontal.
Recuerde: una buena salud bucodental requiere actuar sobre la dieta, además de poner en práctica una buena higiene bucal y visitar regularmente al dentista.

Cómo prevenir las enfermedades bucodentales
1. Tomar una dieta variada y equilibrada que asegure que no se producen déficits de los nutrientes necesarios para la formación de huesos y dientes (minerales como el calcio, fósforo, flúor, hiero y yodo, además de vitaminas A, D y C), sobre todo durante la infancia.
• Evitar comer entre horas, ya que los restos se quedan entre los dientes hasta el siguiente cepillado, lo que favorece la aparición de caries.
• Tomar zumos naturales en vez de concentrados y alimentos tipo manzana que requieren una larga masticación y disminuyen el depósito de restos y la formación de placa, aunque no sustituyen el cepillado.
• Alimentos que reducen la acidez de la saliva, como cacahuetes y quesos, pueden incluirse al finalizar las comidas por su efecto protector frente a la caries.
• Ingerir alimentos ricos en flúor, como pescados azules, mariscos, té, verduras, cereales integrales, legumbres, cebollas, etc., por su efecto anticaries comprobado.
2. Practicar una buena higiene bucal: un correcto cepillado unido al uso de seda o hilo dental y si es posible un irrigador. Está demostrado que el uso de productos fluorados es eficaz frente a la caries.

Medidas generales para un correcto cuidado de la boca

  • Acudir al dentista al menos una vez al año desde edades muy tempranas (una vez tengan toda la dentición de leche), ya que la caries puede manifestarse a partir de que salga el primer diente.
  • Cepillar los dientes, las encías y la lengua, después de cada comida principal y al menos durante dos minutos seguidos. El cepillado será imprescindible antes de dormir y tras el desayuno. Si no se realiza con movimientos cortos, suaves y elípticos, sin olvidar ninguna de las caras de los dientes y las zonas de difícil acceso, no será eficaz.
  • Es recomendable utilizar un cepillo de filamentos firmes y suaves, una pasta dentífrica con flúor para prevenir la aparición de caries y colutorios o enjuagues bucales, pues constituyen una ayuda importante a la hora de mantener sana la boca y evitar patologías e infecciones.
  • Utilizar a diario hilo dental, mejor por la noche, ya que la ausencia de salivación mientras se duerme favorece la formación de placa bacteriana.
  • Completar la limpieza con un irrigador dental. La fuerza del agua remueve mejor la placa bacteriana, mejora el estado de las encías y deja sensación de limpieza y frescor.
  • Los expertos recomiendan renovar el cepillo de dientes cada tres meses, para evitar las enfermedades periodontales.
  • Una alimentación variada y equilibrada rica en frutas y verduras y con un consumo poco frecuente de azúcares simples contribuye a mejorar la salud bucodental.
  • No fumar ni abusar de bebidas carbonatadas.
  • Cuando se come fuera de casa o se toman alimentos entre horas y no hay ocasión de lavarse los dientes, es adecuado recurrir a los chicles sin azúcar y con xilitol (con actividad antimicrobiana) durante 15 ó 20 minutos, pues suben el pH de la boca y son anticariogénicos.
  • Aunque mejoran la estética de las piezas dentales, los blanqueadores no deben utilizarse de forma excesiva y continuada, pues pueden llegar a dañar el esmalte por su alto poder abrasivo.
  • El cepillado antes de dormir es el más importante y debemos realizarlo con especial cuidado, pues durante la noche se segrega menos saliva y las bacterias atacan con más facilidad el esmalte.
  • Para una buena higiene lo mejor es dejarse guiar por el profesional sanitario que, en función de nuestras características, nos dará los productos que mejor se adapten a nuestras necesidades.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *